Ecopetrol evalúa la compra de activos estratégicos de Canacol Energy en Córdoba y Sucre, una operación que podría superar los USD 500 millones y consolidarse como una de las más importantes del sector en 2025. El interés se centra en campos de gas natural que representan más del 20 % del suministro del país, recurso clave para la transición energética. Con esta adquisición, Ecopetrol podría aumentar hasta en un 10 % su capacidad de producción de gas, fortaleciendo la seguridad energética nacional y enviando un mensaje de confianza al mercado. Analistas destacan que la operación tendría un fuerte impacto geopolítico, posicionando a Colombia como hub energético regional con potencial de exportación hacia el Caribe y Centroamérica. Para Canacol, significaría liquidez para expandirse en nuevos mercados sin abandonar Colombia. No obstante, la negociación enfrenta retos regulatorios y ambientales que definirán si esta apuesta se convierte en un verdadero hito para la industria petrolera colombiana.
Fecha:Wednesday 03 Sep de 2025
Gestor:ESCUELA ESGEP
La petrolera estatal colombiana Ecopetrol analiza una posible adquisición de activos estratégicos de Canacol Energy, empresa canadiense con amplia presencia en el país, como parte de su estrategia para reforzar la producción nacional de hidrocarburos y responder a los desafíos de la transición energética. La operación, que aún se encuentra en etapa de evaluación, podría marcar uno de los movimientos corporativos más importantes de la industria petrolera colombiana en 2025.
Fuentes cercanas al sector señalaron que el interés de Ecopetrol se centra en los activos de gas natural de Canacol en los departamentos de Córdoba y Sucre, zonas donde la compañía canadiense ha consolidado operaciones rentables en los últimos años. Estos campos representan más del 20 % del suministro de gas natural del país, un recurso clave para la matriz energética y para la transición hacia energías más limpias.
Ecopetrol considera que integrar estos activos fortalecería su portafolio de recursos convencionales, asegurando un flujo estable de gas natural en momentos de alta demanda y de incertidumbre sobre nuevas exploraciones.
Actualmente, la producción de Ecopetrol se ubica en torno a los 720.000 barriles equivalentes por día, pero enfrenta presiones derivadas de la declinación natural de campos maduros y la necesidad de diversificar su matriz. Con la eventual compra de activos de Canacol, la compañía podría incrementar hasta en un 10 % su capacidad de suministro de gas natural, reforzando su papel como garante de la seguridad energética nacional.
Además, el movimiento enviaría una señal de confianza al mercado en un contexto de discusiones sobre la autosuficiencia energética de Colombia y el futuro de la exploración petrolera bajo la política gubernamental de transición energética.
Aunque el valor de la operación aún no se ha revelado, analistas del mercado estiman que una compra de este tipo podría superar los USD 500 millones, considerando el nivel de reservas probadas y la infraestructura asociada. Para Ecopetrol, significaría una apuesta de largo plazo, alineada con su estrategia de diversificación y reducción de la huella de carbono.
“Ecopetrol busca mantener la rentabilidad sin perder de vista la sostenibilidad. Incorporar activos de gas le permitiría crecer en un segmento menos contaminante y con gran demanda interna”, explicó un experto en energía consultado por medios económicos.
La posible operación también tendría un impacto geopolítico. Colombia es vista como un hub energético en la región andina, y el refuerzo en su capacidad de gas natural podría abrir puertas a exportaciones hacia Centroamérica y el Caribe, donde varios países buscan reducir su dependencia del carbón y el petróleo.
Para Canacol, una eventual venta representaría liquidez para expandirse en nuevos mercados, sin perder presencia en Colombia, donde mantiene contratos vigentes y relaciones sólidas con comunidades locales.
A pesar de la expectativa positiva, la transacción enfrenta retos regulatorios. La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) deberá aprobar cualquier transferencia de activos, asegurando que se cumplan compromisos de inversión, sostenibilidad y consulta previa con comunidades. Asimismo, Ecopetrol deberá balancear el costo de la operación con sus planes de inversión en energías renovables y proyectos de hidrógeno.
En conclusión, la evaluación de la compra de activos de Canacol por parte de Ecopetrol no solo responde a una estrategia de fortalecimiento productivo, sino que también refleja la necesidad del país de garantizar seguridad energética en un contexto de transición. El desenlace de esta negociación podría redefinir el mapa energético colombiano y consolidar a Ecopetrol como un jugador más fuerte y diversificado en la región.